Podcast RESPIRA: Episodio 3

Las adicciones han sido un problema desde hace cientos de años en España. A lo largo de la historia, las adicciones han variado en forma y tipo, pero siempre han afectado tanto a las personas como a la sociedad en general.

Durante la Edad Media y la Edad Moderna, el consumo de alcohol era muy común en España. Los vinos y licores eran muy consumidos y con una enorme producción, especialmente en las zonas rurales. Sin embargo, también había preocupación por los problemas asociados con el consumo excesivo de alcohol, habiéndose producido y aplicado leyes para controlar su venta y consumo.

En el siglo XIX, el consumo de opio y otros narcóticos comenzó a aumentar en España. En la década de 1870, el uso de la morfina se instaló entre la clase médica para tratar el dolor y otras dolencias, pero su expansión a otros ámbitos fuera del espacio sanitario también se hizo evidente. En 1929, se estableció la Ley de Estupefacientes, que regulaba el consumo, producción y venta de narcóticos en España.

En la segunda mitad del siglo XX, el consumo de drogas ilegales, como la marihuana y la cocaína, se convirtió en un problema grave en España. Durante la década de 1980, la heroína se convirtió en una droga muy popular entre los jóvenes, especialmente en las grandes ciudades, lo que condujo a un aumento en la delincuencia y la violencia relacionada con las drogas.

Desde entonces, España ha implementado políticas de prevención y tratamiento de adicciones y ha establecido programas de reducción de daños para reducir los riesgos asociados con el consumo de drogas.

Hoy en día, las adicciones siguen siendo un problema importante en España, pero la sociedad y las autoridades están cada vez más concienciadas sobre la importancia de la prevención y el tratamiento de las adicciones.