
Adicción al deporte

En la sociedad actual el deporte forma parte del estilo de vida de muchas personas. El practicar deporte va mucho más allá del mero ejercicio físico saludable o de la competición.
En ocasiones, puede llegar a convertirse en una actividad excesiva o compulsiva, cayendo en el abuso o la dependencia, como ocurre con muchas otras adicciones comportamentales o sociales.
La persona con problemas de adicción al deporte, sufre compulsión a realizar ejercicio, siente la necesidad y tiene el deseo de realizarlo, aunque ello conlleve un deterioro físico, o comprometa sus relaciones con su entorno (pareja, amigos, ámbito laboral).
Según los estudios, para comprender como se llega a tener una dependencia a una sustancia o a una actividad hay que saber que se pasa por las siguientes fases (Gándara y cols, 1999):
- Apetitiva: se prueba algo y te gusta.
- Ejecutiva: se aprende y se repite
- De saciedad: se abusa hasta la saturación.
- De abstinencia: se intenta abandonar, pero vence a la voluntad.
- De adaptación: en el que el ejercicio puede mantenerse, estabilizarse, agravarse o abandonarse.
Existen pocos métodos de evaluación hoy en día para detectar la adicción al deporte. Se han desarrollado algunas escalas de valoración en inglés. Al igual que con otro tipo de adicciones comportamentales, se necesitan mayores estudios con evidencia científica para conocer el resultado de las intervenciones.
Lo que se recomienda en la actualidad es la terapia psicológica con técnicas cognitivo-conductuales de modificación de conducta.