
Metadona
Descripción
La metadona es una de las herramientas terapéuticas que intervienen de forma fundamental en el tratamiento de los pacientes consumidores de opiáceos.
Permite una normalización de funciones físicas y psicológicas, producidas por los opiáceos de acción corta, como es la heroína.
Se divide en diferentes fases:
- Inicial: eliminar los síntomas de la abstinencia.
- Inducción: establecer la dosis adecuada.
- Mantenimiento: mantener los efectos deseados.
Vía de administración
Se puede administrar por vía oral, rectal, endovenosa y subcutánea.
Se suministra en los Centros de Atención a las Adicciones, en las unidades móviles o en las farmacias.
Metabolismo
La metadona es un potente opioide sintético de larga vida media que actúa como agonista de los receptores opioides.
Al unirse a los receptores del sistema nervioso central (SNC) inhibe las vías ascendentes alterando la percepción y respuesta al dolor, produce depresión del SNC.
Efectos
En consumidores de metadona, se han observado déficit en procesos visoespaciales, velocidad de procesamiento, atención y memoria operativa.
Efectos más frecuentes: mareo, sedación, náuseas, vómitos e hiperhidrosis, retención de líquidos, anorexia, hipocalcemia, hipomagnesemia, hipoglucemia, euforia, alucinaciones, visión borrosa, miosis, ojos secos, vértigo, estreñimiento, fatiga y somnolencia.
Metadona y otras sustancias
El uso de otras sustancias que estimulen el sistema de oxidación hepática (alcohol y tabaco), pueden dar lugar a interacciones con metadona y el consiguiente ajuste de dosis.
El uso de medicamentos agonistas/antagonistas opiáceos (benzodiacepinas, cocaína), puede dar lugar a SAO por desplazamiento de opiáceos en los receptores.
Disminución de Riesgos y Reducción de Daños
- Determinar la dosis de metadona tras valoración médica.
- Administrar las dosis suficientes en las diferentes fases (inicial, inducción y mantenimiento) para producir la respuesta deseada en el paciente durante el tiempo conveniente, garantizando un margen de eficacia y seguridad.
- Asegurarse que los antecedentes del paciente y el examen físico apoyan la valoración del médico
- No modificar las dosis, para reforzar un comportamiento positivo o penalizar un comportamiento negativo.
- El tratamiento del dolor es independiente del tratamiento con metadona, éste debe ser tratado con los analgésicos habituales.
Documentos y enlaces de interés
¿Tienes problemas de adicción?
Si tienes dudas o alguna consulta, puedes ponerte en contacto con nosotros a través de las siguientes opciones.
